Desde el Gobierno han logrado identificar a los establecimientos responsables de los incendios forestales registrados desde hace un mes en la región norte del Chaco y se impulsan los procesos de sumario para aplicar las sanciones respectivas.
Los procedimientos para la identificación fueron impulsados por el Instituto Forestal Nacional (Infona) y el Ministerio del Ambiente (Mades), informaron autoridades de ambos entes luego del acto de reconocimiento a los bomberos que combatieron a las llamas en la zona chaqueña.
Al respecto, la presidenta del Infona, Cristina Goralewski, informó que se han identificado el origen de los incendios registrados en Toro Pampa y en la zona del Cerro Chovoreca, éste último afectó a 200.000 hectáreas.
Los propietarios fueron llamados a declarar por la Fiscalía tras la denuncia presentada y en estos momentos se aguarda el cumplimiento de los plazos procesales para la respuesta de los acusados.
En tanto, el ministro de Emergencia Nacional (SEN), Arsenio Zárate, instó a la población a no quemar y solicitó que se apliquen sanciones ejemplares por el daño ambiental ocasionado en la región norte del Chaco.
“Esta situación es anormal, es un delito contra el medio ambiente y la persona que inició el fuego tiene que pagar para que podamos disminuir, en lo posible, terminar con este flagelo que estamos teniendo, no solamente este año, sino que desde hace varios años y que se agrava con el cambio climático”, manifestó.
Respuesta a eventos climáticos
El ministro del Ambiente, Rolando de Barros Barreto, señaló que se cuenta con una situación de sequía desde hace al menos 3 años que en estos momentos afecta gravemente al Río Paraguay, tanto en el suministro de agua para ciertas comunidades como en la navegabilidad.
Los pronósticos indican que la bajante histórica de los niveles del río va a continuar durante las próximas semanas. Desde el Gobierno se evalúa el dragado en puntos críticos para asegurar la navegabilidad, aunque la bajante se tiene como previsión que afecte en los precios de productos de la canasta básica y de combustibles.
Fonte: La Nacion